Estratagema 4. Esperar con tranquilidad al enemigo exhausto
El éxito del
uso de estratagemas depende en gran medida de tu talento e imaginación. Hay que
entender que a pesar de que las estratagemas siempre funcionan, hay una serie
de “peros” condicionantes. Y el “pero” más importante es qué tan bien aprendiste a aplicarlas,
qué tan bien las entiendes y de cuánto te brinda tu imaginación buenas formas
de usar la estratagema.
Hoy nos toca
hablar sobre la Estratagema número Cuatro. En chino suena como Yi Yi
Dai Lao 【以逸待勞】y la
podríamos traducir como: “Esperar en paz a un enemigo cansado”. Es
“La estratagema de desgastar al enemigo”.
Esta estratagema es esquemáticamente muy similar a la otra estratagema llamada Estratagema de la Fuerza enemiga, donde
atacamos a la fuerza enemiga. Hablaremos de esto más adelante, entenderás de lo
que estamos hablando.
La palabra
central, el término central de esta estratagema es el concepto de “La Paz” o “La Tranquilidad”. En general, el concepto de “La Paz” o “La Tranquilidad”
para la civilización china en particular, para la civilización oriental en
general, es uno de los conceptos más importantes. Existe un libro antiguo, el Yi
jing chino, el Libro de los
Cambios, que describe 64 estados básicos de la mente humana, de los cuales
ocho son centrales.
La Paz es uno de estos ocho estados, específicamente el estado número seis.
Se nos da La Paz para que podamos
encontrarnos a nosotros mismos desde el punto de vista del propio Yi
jing. La Paz implica que nos
calmemos intelectualmente a nuestra mente. Esto incluye nuestros deseos
también. Porque para la civilización china, el corazón es el pivote central de
todo.
Tranquilidad
(de)
▶
Mente
(de deseos)
▶
Cuerpo
(de acciones)
▶
Emociones
(de sentimientos)
Según los
chinos antiguos, el centro de la mente no es el cerebro, sino es el corazón.
Para muchas civilizaciones antiguas, el corazón es en realidad el centro del
pensamiento. El deseo es parte del pensamiento. La segunda parte es la calma
física, es decir corporal. En realidad estamos en paz esperando al enemigo
exhausto, así, nosotros nos encontramos en un estado físico de calma.
En otras
palabras, no nos vemos obligados a trabajar más de lo necesario. No estamos
obligados a hacer más de lo necesario. Nosotros no, mientras que el enemigo se
ve obligado a hacerlo.
Fatigar al
enemigo (en)
▶
Mente
(provocar dudas)
▶
Cuerpo
(provocar fatiga)
▶
Emociones
(provocar emociones, como la ira)
Bueno,
naturalmente estamos hablando de paz emocional. Estamos refiriéndonos a los
casos clásicos sobre la necesidad de enfurecer al enemigo. Y así sale del
estado del estado calmado de tranquilidad y paz mental y entonces es más fácil
derrotarlo. Hay muchos ejemplos de usar esta estratagema en las series
policíacos cuando un detective logra perturbar la paz mental de un supuesto
delincuente, con lo que ése se altera y suelta alguna información vinculante al
delito. Porque en un estado emocional de discordia, es probable que el enemigo
cometa un error. Entonces, la fatiga del enemigo puede consistir en el hecho de
que le introducimos en algún tipo de estado emocional negativo, un estado de
ira, por ejemplo. Mentalmente le imponemos una serie de dudas, con lo que
empieza a dudar de sus propias capacidades. Es decir, al principio el enemigo
cree en sí mismo, está seguro de sí mismo y de sus capacidades, y luego en
algún momento deja de creer en sí mismo, y así el pensamiento se desanima, y es cuando
podemos derrotarlo. Etcétera. Curiosamente, el jeroglífico utilizado para
transmitir la palabra “La Tranquilidad” contiene dos partes, que en sinología
se llaman radicales. Y para explicar eso tenemos que abrir un paréntesis en la
narrativa sobre la Estratagema y pasarnos brevemente al tema del idioma chino.
Conocimientos
básicos sobre idioma chino
La reforma de
la escritura china en el siglo XX y la sustitución del sistema de romanización
Wade-Giles por el pinyin son aspectos importantes de la modernización del
idioma chino. Para poder hablar sobre la cultura y civilización chinas es
importante tener conocimiento sobre esos eventos.
Reforma de la
escritura china en el siglo XX
La reforma de
la escritura china en el siglo XX fue un aspecto clave de la modernización del
idioma y formó parte de un esfuerzo más amplio en China para adaptarse a los
nuevos tiempos. Uno de los cambios más significativos fue la simplificación de
los caracteres chinos, impulsada por el gobierno de la República Popular China
desde la década de 1950. Esta reforma buscaba hacer el idioma más accesible y
fácil de aprender, eliminando trazos complejos y adoptando formas más simples.
En 1956, se publicó una versión oficial de los caracteres simplificados, que se
utilizan hoy en día en China continental, Singapur y Malasia. En contraste, por
divergencias más que nada políticas, los caracteres tradicionales siguen siendo
usados en lugares como Taiwán, Hong Kong y Macao donde se desconocen y no se
aceptan los jeroglíficos simplificados.
Al mismo
tiempo, el gobierno chino promovió el mandarín estándar, conocido como Pu tong
hua, como el idioma oficial del país. Este esfuerzo pretendía unificar
el idioma en una nación con numerosos dialectos regionales, facilitando así la
comunicación entre sus habitantes. El mandarín estándar se basa en el dialecto
de Beijing (nórdico) y fue acompañado de campañas masivas de alfabetización que
se lanzaron en las décadas de 1950 y 1960. El objetivo de estas campañas era
enseñar a leer y escribir en chino simplificado, elevando el nivel de
alfabetización en la población.
Por otro lado,
la romanización del idioma chino, que es la representación del chino en
caracteres latinos, también fue objeto de reforma. Durante gran parte del siglo
XX, el sistema de romanización predominante en el mundo occidental fue
Wade-Giles, creado en el siglo XIX por los sinólogos británicos Thomas Wade y
Herbert Giles. Aunque Wade-Giles representaba con precisión la pronunciación
del chino mandarín, tenía ciertas limitaciones, como el uso de apóstrofes y
signos que resultaban confusos para los no expertos.
En 1958, la
República Popular China introdujo un nuevo sistema de romanización, el Hanyu Pinyin, o simplemente pinyin. Este sistema estaba diseñado
para ser más sencillo y accesible que Wade-Giles. Basado en el alfabeto latino,
el pinyin establecía reglas claras para la pronunciación de las sílabas en
mandarín. Su adopción se extendió rápidamente, convirtiéndose en el estándar
oficial en China, y fue reconocido también por organismos internacionales como
la ONU y la ISO.
La sustitución
de Wade-Giles por pinyin tuvo un impacto profundo en la
enseñanza del chino mandarín a nivel mundial. El pinyin es más fácil de
aprender y utilizar que Wade-Giles, y ha sido crucial en la promoción del chino
como lengua extranjera. La simplificación y accesibilidad del pinyin, al
eliminar signos diacríticos complicados, contribuyó a su adopción global.
Además, la estandarización del pinyin dentro de China formó parte de los
esfuerzos gubernamentales para modernizar el idioma, convirtiéndolo en la norma
en la educación, los medios de comunicación y la señalización. Finalmente, la
internacionalización del pinyin facilitó la enseñanza del chino a extranjeros y
su adopción en contextos tecnológicos, como la informática y los sistemas de
entrada de texto en dispositivos electrónicos.
Radicales, ideogramas y fono ideogramas
El idioma chino tiene una estructura
única y compleja basada en caracteres, que pueden dividirse en varios tipos
según su origen y función. Los más importantes son los 1). Radicales; 2). Ideogramas
y 3). Fonoideogramas.
▶
Radicales
Los radicales son los componentes
básicos de los caracteres chinos. Funcionalmente, los radicales actúan como “llaves” para clasificar y buscar
caracteres en los diccionarios chinos. Cada carácter chino se compone de al
menos un radical, que generalmente aporta información sobre el significado
general del carácter. Hay 214 radicales tradicionales, aunque algunos
caracteres modernos simplificados han reducido este número. Por ejemplo, el
radical 【氵】 (tres gotas de agua) aparece en caracteres
relacionados con el agua o líquidos, como en 【江】 [jiāng], que
significa “río”. Otro ejemplo es el
radical Zhu【⺮】 (bambú), que se usa en caracteres
relacionados con el bambú o cosas hechas de bambú, como 【筷】 [kuài], (palillos).
▶
Ideogramas
Los ideogramas son caracteres que
representan ideas abstractas a través de su forma gráfica. Se cree que los
ideogramas son uno de los métodos más antiguos de creación de caracteres
chinos. Un ejemplo clásico es el carácter Yi【一】 [yī], que
representa el número uno, o Shang【上】[shàng], que
representa la idea de “arriba”. Estos
caracteres son muy directos en su representación gráfica de ideas y conceptos
simples, pero son relativamente pocos en comparación con otros tipos de caracteres.
▶
Fonoideogramas
La mayoría de los caracteres chinos son
fonoideogramas o caracteres fonosemánticos 【形声字】, [xíngshēngzì].
Estos caracteres combinan un componente fonético, que sugiere la pronunciación,
con un componente semántico, que indica el significado general. El radical
usualmente cumple la función semántica, mientras que el componente fonético
orienta sobre la pronunciación.
Un ejemplo es el carácter 【河】 [hé], (que
significa río). Este carácter está compuesto por el radical 【氵】, que sugiere una
conexión con el agua, y el componente fonético 【可】[kě], que da
una pista sobre su pronunciación.
Ejemplos
de caracteres simplificados con sus formas complejas
Durante las reformas del idioma chino en
el siglo XX, muchos caracteres tradicionales fueron simplificados para
facilitar su escritura y aprendizaje. A continuación se presentan algunos
ejemplos de caracteres simplificados junto con sus formas tradicionales.
En el carácter simplificado 【爱】, se ha eliminado la parte superior central del carácter tradicional 【愛】.
El carácter simplificado 【龙】 es una versión
condensada del carácter tradicional 【龍】.
En el carácter simplificado 【云】, se ha
reducido la complejidad de 【雲】.
El carácter simplificado 【电】 es más
sencillo que la versión tradicional 【電】.
En el carácter simplificado 【劳】, se ha reducido la parte superior compleja en 【勞】, haciendo que el carácter sea más sencillo de escribir, pero conservando el radical básico 【力】 que indica trabajo o esfuerzo.
Pero no todos los jeroglíficos fueron
simplificados, algunos se quedaron en su forma original.
Con todo lo anterior podemos resumir que
el sistema de escritura chino se basa en la combinación de radicales,
ideogramas y fonoideogramas, lo que lo hace extremadamente rico y
multifacético. La reforma de la escritura en el siglo XX pretendía simplificar muchos
de los caracteres complejos, facilitando su aprendizaje y uso en la vida
cotidiana, aunque las formas tradicionales siguen siendo empleadas en algunos
lugares y todos los textos previos a los 1950 están escritos en caracteres
complejos ya que los simplificados aparecieron luego. Los radicales permiten
una clasificación lógica, mientras que los ideogramas y fonoideogramas
proporcionan tanto significado como pronunciación a los caracteres
individuales.
Ideogramas
de la Estratagema Cuatro
Tal como lo
hemos visto anteriormente, en general, los caracteres chinos constan de los
llamados radicales, y muchos caracteres constan de una combinación de estos
radicales. En el del ideograma Tranquilidad,
Yi
【逸】hay dos radicales que lo forman, uno de los cuales
es Chuo
【廴】que se traduce como “camino”, que por cierto, es el mismo radical que se utiliza en el
carácter Dao【道】que también significa “la vía”, “el camino” y que ya conocemos desde la obra Dao De Jing. Y el segundo
radical es la Liebre, Tu【兔】.
Entonces “La Tranquilidad” es “La liebre” Tu【兔】que “Huye” Chuo【辶】. Por
tanto, este jeroglífico podríamos interpretarlo “El Camino de la Liebre”. O yo la llamo la Estrategia de la Liebre. ¿Qué hace la Liebre cuando huye del
depredador? Recuerda imágenes de varios documentales.
La liebre
cansa a su oponente, comienza una carrera, y para él esta carrera es un estado muy familiar. Toda su naturaleza
es capaz de completar esta carrera. Lo hace con facilidad. Sus patas traseras
son muy fuertes, gracias a ellas puede correr muy rápido y a altas velocidades
durante largos períodos del tiempo.
Y sus piernas
también le permiten realizar giros bruscos. Es decir, para él este es un estado conocido. Pero es difícil para un
enemigo, para un depredador, hacer tales giros y luego otra vez ganar tanta
velocidad. Por eso el enemigo corre tras la liebre, parece que ahora la va a
atrapar, la va a alcanzar. En algún momento la liebre gira y el enemigo se da
cuenta de que ha vuelto a fallar.
Y cada vez que
el depredador intenta alcanzar a la liebre, y cada vez que falla, cada vez se
cansa más y más. Si el enemigo de alguna manera no ha descubierto cómo lidiar
con esta condición, lo más probable es que deje de intentar correr tras la liebre
y la liebre de esperará en paz al enemigo cansado. Es decir, así la Liebre
puede deshacerse del enemigo.
Es interesante
analizar el otro ideograma que es “Exhausto” o Lao en Chino que se
escribe en forma compleja como 【勞】 y en
forma simplificada como 【劳】. En
el jeroglífico complejo vemos que tenemos dos fuegos 【𤇾】 sobre
el Techo, Mi【冖】y debajo tenemos la Fuerza, Li【力】
. Entonces tenemos el significado del
ideograma complejo como “Trabajar a la
luz de la lámpara, durante la noche”. En la versión simplificada los dos
Fuegos se sustituyen por la Hierba, Cao
【艹】 , y entonces tenemos “La Hierba”, sobre “El Techo”
y “La Fuerza” que está debajo.
Es decir, ¿qué hace la liebre? Se esconde. De hecho, el “cansancio” también es algo que se debe ocultar del enemigo. Cuando corres y juegas al gato y al ratón con él, en este sentido estás al escondite, el enemigo gasta mucha energía y tiempo tratando de encontrarte. Se ve obligado a realizar un montón de acciones que no son necesarias para tener éxito. Es decir, si supiera dónde estamos, iría directamente allí y nos atraparía por ser más fuerte, pero en lugar de eso se ve obligado a correr de un lado a otro, brincar, buscar, preocuparse, y a esperar que ahora nos encuentre. Pero luego no nos encuentra y así sucesivamente. Es así como el enemigo se cansa. Para la liebre es un juego habitual, es su forma de vida, pero para el enemigo es un fuerte ejercicio físico.
Tenemos que
comprender que la Estragema 4 está vinculada a la vida de los partisanos, que sí, que viven una vida bastante dura,
pero en general los partisanos no libran
ninguna batalla abiertamente. Aparecen y desaparecen. No tienen ofensiva ni
defensa, simplemente se sientan en sus escondites, en algunos lugares ocultos,
y descansan.
Sí, los
partisanos están listos para la batalla, tienen armas listas, realizan
reconocimientos, de vez en cuando atacan al enemigo, pero la mayoría de las
veces no hacen nada. No gastan mucha energía ni muchos recursos luchando contra
el enemigo. Simplemente viven sus vidas. Y esta es una posición que, en
principio, te permite ganar.
Cualquiera
puede entrar en un estado de paz. Puedes hacerlo tú también. Puede que no
entiendas completamente cómo, pero tienes todo lo que necesitas para lograr la
paz y tranquilidad mental. Haz de esa práctica tu ejercicio diario. Aprende a
entrar en un estado de calma en cualquier situación. Hay varias maneras de
lograrlo. Algunas las describimos aquí, en este blog. Otras las puedes buscar
por ti mismo. Esta es probablemente una de las pocas condiciones que vale la
pena desarrollar. Vale la pena desarrollar la habilidad de calmarse usted mismo. El segundo punto, el aspecto prometedor,
asociado con esta estratagema es el hecho de que cualquier enemigo puede estar
cansado. Siempre hay algo que puede cansar a tu enemigo, es decir, a tu
obstáculo. Tal factor existe, sólo es tu tarea importante encontrarlo, entender
qué es y utilizarlo eficazmente.
Hechos históricos relacionados con la
aplicación de la Estratagema 4
Históricamente,
esta táctica ha sido empleada en diversas situaciones militares, sobre todo en
guerras prolongadas donde el desgaste juega un papel fundamental. Esta
estratagema se refiere a la idea de conservar
la energía propia mientras se deja que el enemigo se desgaste por sí solo,
mediante el tiempo, el agotamiento de recursos, o la falta de preparación.
▶
Batalla de
Guandu (200 d.C.)
En la era de
los Tres Reinos en China, el famoso
general y estratega Cao Cao usó esta estratagema contra su rival Yuan Shao.
Yuan Shao contaba con un ejército mucho más grande y aparentemente invencible.
Sin embargo, Cao Cao decidió no enfrentarlo directamente, sino esperar hasta
que las fuerzas de Yuan Shao se desgastaran, principalmente debido a la mala
logística y las largas líneas de suministro. A medida que el ejército de Yuan
Shao se agotaba y perdía cohesión, Cao Cao lanzó un ataque en el momento
adecuado, lo que resultó en una victoria decisiva para él en la Batalla de
Guandu.
▶
Campaña de
los Diez Mil Días (Primera Guerra Sino-Japonesa, 1894-1895)
Durante esta
guerra entre China y Japón, Japón adoptó una versión de esta estratagema. Los
japoneses, mejor preparados y con un ejército más eficiente, decidieron
mantener la presión constante y esperar a que el ejército chino se debilitara
por la falta de entrenamiento, mala logística y la corrupción interna.
Finalmente, los chinos no pudieron resistir más y colapsaron, lo que llevó a la
victoria japonesa.
▶
Guerra de
Vietnam (1955-1975)
Durante la
Guerra de Vietnam, el Viet Cong y las fuerzas comunistas norvietnamitas también
emplearon una táctica de desgaste contra las fuerzas estadounidenses. Evitaron
enfrentamientos directos y se concentraron en desgastar lentamente a sus
oponentes mediante emboscadas, refugios subterráneos, ataques de guerrilla y
desgaste psicológico. Los estadounidenses, aunque tecnológicamente superiores,
sufrieron un desgaste prolongado que afectó tanto a su moral como a su
capacidad militar. Este enfoque de desgaste progresivo llevó finalmente a la
retirada de las fuerzas estadounidenses.
▶
Guerra de la
Independencia Española (1808-1814)
Durante la
invasión napoleónica de España, las fuerzas españolas y guerrilleras emplearon
tácticas similares contra las tropas francesas, que eran superiores en número y
organización. Los guerrilleros españoles adoptaron tácticas de ataque sorpresa
y evitaron enfrentamientos directos, desgastando poco a poco al ejército de
Napoleón Bonaparte, que acabó exhausto y con dificultades para mantener el
control del territorio. La estrategia de desgaste español, junto con la
participación de las fuerzas británicas bajo el mando de Wellington, contribuyó
a la derrota final de las tropas francesas.
La esencia
de la estratagema “En tranquilidad,
esperar al enemigo exhausto” radica en evitar
el enfrentamiento directo cuando el enemigo está fuerte y esperar
pacientemente hasta que, por sus propias acciones o por factores externos, se
debilite. Solo entonces se debe actuar de manera decisiva para obtener la
victoria.
Aplicación de la Estratagema 4 en obras de
cine, teatro y novelas
La
estratagema “En tranquilidad, esperar al
enemigo exhausto” también ha sido representada en diversas formas de
narrativa, como el cine, el teatro y la literatura. En estas obras, los
personajes o facciones utilizan la paciencia y el desgaste de sus oponentes
para lograr la victoria, en lugar de enfrentar directamente a un enemigo
poderoso desde el principio.
En el Cine,
podemos mencionar las siguientes películas.
▶
“Gladiator”
(2000)
En la
película dirigida por Ridley Scott, el protagonista Máximo Décimo Meridio
(Russell Crowe), un general romano convertido en esclavo y gladiador, utiliza
esta estratagema en varias ocasiones. En la arena del coliseo, Máximo lidera a
los demás gladiadores para resistir los ataques iniciales de sus oponentes,
dejando que sus enemigos se agoten antes de lanzar un contraataque decisivo.
Este enfoque le permite derrotar a rivales más fuertes y mejor armados,
convirtiéndose en un héroe popular.
▶
“El Padrino”
(1972)
En esta
icónica película de Francis Ford Coppola, Vito Corleone (Marlon Brando) y su
hijo Michael Corleone (Al Pacino) aplican la estrategia de paciencia y
desgaste. Michael, especialmente, espera a que sus enemigos se muestren
vulnerables y cometan errores. No busca la confrontación directa de inmediato,
sino que deja que los rivales de la familia Corleone se agoten por sus propias
luchas internas o fallas, y luego actúa en el momento preciso. Esto es evidente
en el clímax, cuando, tras haber esperado pacientemente, Michael se venga de
todos los enemigos de su familia en un solo golpe coordinado.
▶
“Braveheart”
(1995)
En este
drama histórico, el protagonista William Wallace (Mel Gibson) lidera a los
escoceses en su lucha por la independencia de Inglaterra. En la famosa Batalla
de Stirling, Wallace y sus hombres emplean una táctica similar a la estratagema
4. Permiten que las fuerzas inglesas, que son numéricamente superiores, avancen
hacia ellos en el campo de batalla. Mantienen la calma y esperan hasta que el
enemigo esté suficientemente cerca y desorganizado, lo que les permite
contraatacar de forma efectiva y lograr una gran victoria.
En el
Teatro, podemos mencionar las siguientes obras.
▶
“Hamlet”
(1601) – William Shakespeare
En esta obra
clásica, Hamlet, el príncipe de Dinamarca, utiliza la paciencia como parte de
su plan para vengar la muerte de su padre. En lugar de atacar directamente a su
tío Claudio, el asesino de su padre, Hamlet actúa con cautela y espera a que
las circunstancias sean más favorables. A lo largo de la obra, va minando la
estabilidad emocional y psicológica de sus enemigos, esperando hasta el momento
en que puedan ser derrotados de forma segura. La estrategia de Hamlet no es
actuar por impulso, sino esperar
pacientemente a que sus enemigos se desgasten y cometan errores.
▶
“Coriolano”
(1608) – William Shakespeare
En esta
obra, el protagonista, Cayo Marcio Coriolano, es un general romano que se
enfrenta tanto a enemigos externos como a tensiones internas en Roma. Uno de
los momentos clave de la obra es cuando los Volscos, bajo el liderazgo de Tulo
Aufidio, emplean tácticas para desgastar a Roma mediante alianzas y traiciones.
Aunque la obra no sigue estrictamente la misma línea de desgaste físico que
otras historias, las maniobras políticas y la espera para atacar cuando Roma
está dividida internamente son ejemplos de desgaste y paciencia estratégica.
En novelas,
podemos mencionar la famosa obra de Víctor Hugo, Los Miserables.
▶
“Los
Miserables” (1862) – Victor Hugo
El personaje
de Jean Valjean aplica la paciencia y la resistencia pasiva frente a su
enemigo, el implacable inspector Javert. Valjean no busca confrontar
directamente a Javert, sino que elude sus intentos de captura durante años,
desgastando así la moral y el sentido de justicia inflexible de Javert.
Valjean, con el tiempo, agota a Javert, quien finalmente se da cuenta de la
inutilidad de perseguir a alguien que, moralmente, es un hombre bueno. Este
agotamiento de la persecución se convierte en uno de los elementos trágicos de
la novela.
La
estratagema “En tranquilidad, esperar al
enemigo exhausto” es un tema recurrente en narrativas donde los personajes
deben enfrentarse a enemigos más poderosos. Se manifiesta en una amplia gama de
historias, desde tragedias clásicas hasta películas modernas, en las que la
paciencia, la astucia y el desgaste del oponente son clave para lograr la
victoria o la justicia.
La estratagema 4 en la vida cotidiana y en el
ámbito personal
La
estratagema “En tranquilidad, esperar al enemigo exhausto” no solo se aplica a
nivel militar o en la política, sino también en la vida cotidiana y en el
ámbito personal. Esta táctica se puede utilizar cuando enfrentamos desafíos,
conflictos o situaciones difíciles, donde en lugar de actuar impulsivamente,
esperamos con paciencia hasta que la situación sea favorable. Aquí algunos
ejemplos de su aplicación a nivel personal:
▶
Resolución de
conflictos personales
En
discusiones o conflictos con amigos, familiares o colegas, en lugar de
responder de manera agresiva o impulsiva, es útil mantener la calma y dejar que
la otra persona se agote emocionalmente. A menudo, cuando las personas están
molestas, tienden a cometer errores o perder la compostura. Si uno permanece
tranquilo, escucha y espera el momento adecuado para hablar, la otra persona
podría calmarse y estar más abierta a la resolución pacífica del conflicto.
Como decía mi amigo, el Ingeniero Jaime, El ajedrecista del Parque Sanz en el
Este de Caracas, mientras jugábamos con él cuando yo pensaba que ya tenía la
partida ganada, “no te precipUtes”.
Por ejemplo,
imaginemos que un amigo está muy enojado contigo por un malentendido. En lugar
de defenderte inmediatamente y empeorar la discusión, decides escuchar con
calma y esperar a que el amigo se desahogue. Luego, cuando ha agotado su
energía, explicas tu punto de vista con serenidad, lo que facilita la
reconciliación.
▶
Negociaciones
laborales
En el
entorno laboral, puede haber situaciones en las que uno esté buscando una
mejora de condiciones, como un aumento de salario o una promoción. En lugar de
exigir resultados inmediatamente, una buena estrategia sería esperar el momento
adecuado, cuando la empresa o el jefe estén en una posición de mayor debilidad
o necesidad (por ejemplo, cuando hay una falta de personal o un gran proyecto
en marcha). Al estar preparado y no precipitarse, es posible negociar desde una
posición más fuerte y obtener mejores resultados.
Por ejemplo,
imaginemos que tu jefe está bajo presión porque varios empleados clave han
renunciado. En lugar de pedir un aumento cuando las cosas van bien, decides
esperar hasta que se acerque una fecha límite importante, momento en el que tu
trabajo será esencial para el éxito de la empresa. Esto te permite negociar un
aumento o una promoción con más ventaja.
▶
Competencia
profesional
En ambientes
altamente competitivos, como en una oficina o en el ámbito académico, muchas
veces los colegas o compañeros intentan sobresalir compitiendo agresivamente o
trabajando de manera excesiva. En lugar de entrar en una competencia agotadora,
se puede optar por trabajar de manera constante y tranquila, evitando agotarse,
mientras los otros competidores se desgastan. Al final, quienes se agotaron no
podrán mantener el ritmo, y aquellos que mantuvieron la calma y el enfoque
lograrán destacar.
Por ejemplo,
supongamos que en tu equipo de trabajo, varios compañeros están compitiendo
ferozmente por un ascenso, trabajando horas extras y tomando más proyectos de
los que pueden manejar. Tú decides mantener un enfoque equilibrado, cumpliendo
con tus responsabilidades de manera eficiente sin agotarte. Con el tiempo, tus
compañeros comienzan a cometer errores debido al agotamiento, mientras que tú,
al haber mantenido tu energía, logras rendir mejor y finalmente consigues el
ascenso.
▶
Toma de
decisiones financieras
En el mundo
de las inversiones y las finanzas personales, esta estratagema también es muy
útil. Por ejemplo, en lugar de entrar en pánico cuando el mercado cae o cuando
parece que todo el mundo está tomando decisiones rápidas, es más prudente
esperar y observar cómo se desarrolla la situación. Los inversores más exitosos
suelen esperar hasta que los mercados se estabilicen o cuando los demás se han
agotado emocionalmente debido a la volatilidad. Este enfoque paciente permite
tomar decisiones más informadas y menos arriesgadas.
Por ejemplo,
sabemos que durante una crisis financiera, muchos inversores entran en pánico y
venden sus activos a precios bajos, temiendo que los mercados colapsen. En
lugar de actuar impulsivamente, decides esperar, confiando en que el mercado se
recuperará con el tiempo. Cuando los demás han agotado sus recursos y las
acciones están a precios bajos, decides comprar, obteniendo beneficios cuando
el mercado eventualmente sube.
▶
Superación de
un desafío físico o mental
Cuando se
enfrenta un reto físico o mental, como correr un maratón, estudiar para un
examen importante o desarrollar un proyecto a largo plazo, la paciencia y
control del propio ritmo son la clave del
éxito. En lugar de desgastarse desde el principio, es más efectivo
conservar la energía y mantener un ritmo constante, dejando que otros se agoten
por su entusiasmo inicial. Al final, serás el que mejor se desempeñe cuando el
resto esté exhausto.
Por ejemplo,
imaginemos que piensas participar en un maratón como yo lo hice alguna vez albergando
la esperanza de ir a maratón de Nueva York. Al inicio de la competición, muchos
corredores salen con demasiada energía, corriendo a un ritmo muy rápido. Sin
embargo, tú debes entrenarte especialmente para mantener un ritmo moderado,
conservando tu energía, aunque tus competidores te toman ventaja en tiempo. A
medida que avanzas, los corredores delanteros empiezan a agotarse y a disminuir
su velocidad, mientras tú te mantienes constante y hasta aceleras en la parte
final de la competición, con lo que terminas adelantándolos en las últimas
etapas de la carrera.
▶
Manejo de
relaciones personales difíciles
En
relaciones complejas o tóxicas, puede ser beneficioso no responder
inmediatamente a las provocaciones o manipulaciones emocionales. Al mantener la
calma y no reaccionar ante los ataques o las actitudes negativas, la otra
persona puede agotarse emocionalmente al no obtener la reacción deseada. Esto a
menudo lleva a que la persona conflictiva pierda interés en continuar con su
comportamiento, permitiendo que se resuelva el conflicto sin confrontaciones
directas.
Imaginemos
otro ejemplo. Imaginemos que estás en una relación con una persona que tiene
comportamientos manipuladores, como provocarte para que reacciones emocionalmente.
En lugar de entrar en sus juegos y responder con enojo, decides no reaccionar.
Con el tiempo, la persona se da cuenta de que no puede controlar tus emociones
y empieza a cambiar su comportamiento o se aleja de ti, dejando de crear
conflictos.
▶
Esperar
oportunidades en el ámbito social
A veces, en
situaciones sociales o profesionales, es mejor no ser el primero en actuar,
sino observar y esperar a que se presente una oportunidad más favorable. Esto
puede ser en el contexto de buscar amistades, establecer conexiones de trabajo
o incluso al cortejar a alguien. Al esperar con paciencia mientras otros se
precipitan, se pueden aprovechar oportunidades que los demás han dejado pasar o
han agotado.
Imaginemos
otro ejemplo, imaginemos que estás interesado en un puesto de liderazgo en una
organización comunitaria, pero otros están compitiendo agresivamente por el
puesto. En lugar de entrar en la competencia, decides involucrarte de manera
gradual, mostrando compromiso y paciencia. Después de un tiempo, otros
candidatos se agotan o pierden interés, y finalmente tú puedes obtener el
puesto de liderazgo.
La
estratagema “En tranquilidad, esperar al
enemigo exhausto” es una herramienta valiosa a nivel personal. Aplicarla
implica tener paciencia, evitar reacciones impulsivas, y aprovechar el desgaste
emocional o físico de los demás, ya sea en conflictos, competiciones
profesionales o en toma de decisiones importantes. Al mantener la calma y
actuar en el momento adecuado, es posible lograr el éxito en diversas
situaciones cotidianas.
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© Nikolai Barkov, 2024
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