¡Buscamos y encontramos la fuerza en nosotros mismos!   1. No eres tu pasado. No importa cuán caótico pueda ser tu pasado, el camino está claro, fresco y abierto ante ti. No eres tus hábitos pasados. No eres tus errores del pasado. No eres como alguien te trató una vez. Eres solo tú de aquí y ahora. T ú sólo e res tus acciones presentes.   2. Enfócate en lo que tienes, no en lo que no tienes. Eres quien eres y lo que tienes en este momento. Y, para ser honesto, tu situación no es tan mala; de lo contrario, no estaría leyendo este artículo. Lo que realmente necesitas es encontrar un pensamiento positivo que te inspire y te ayude a seguir adelante. Aférrate a él con la mayor fuerza posible y trata de concentrarte en él. Por supuesto, puede parecerte que no tienes nada, y si tienes algo es realmente muy poco, pero tu mente bien puede inspirarte. Y esa inspiración es lo único que realmente necesitas para empezar a avanzar de nuevo.   3. Los problemas son una parte integral