SALIR DE LA ZONA DE CONFORT

 

EXPLICO QUIÉN NO LO NECESITA REALMENTE Y CÓMO ÉSTE PUEDE SER PERJUDICIAL

                                                              

 

Salir de la zona de confort ya se ha convertido en una especie de tendencia en los últimos años. Sus bondades se transmiten desde casi todas las emisoras, empujando a todos y todas a salir de sus límites habituales.

 

Pero, ¿todo es realmente tan color de rosa como dicen? ¿Realmente deberías salir de tu zona de confort?

 

Sí, es necesario salir de la zona de confort, PERO no para todos y no en todos los casos. Esto debe hacerse solo dentro de los límites razonables, cuando algo en la vida no le conviene o deja de satisfacerlo.

 

Por ejemplo, si usted sueña con tomar un puesto más alto en su trabajo, ascender en la escala profesional, definitivamente tiene que salir de su zona de confort y hablar con su jefe. O si sueña con cambiar de profesión, aprender algo nuevo, allí también tendrá que ir más allá de lo habitual. Y esta salida de su área de confort le podría ser útil.

 

En otros casos, esto no es necesario. Si está tratando de salir de su zona de confort solo por salir, este enfoque le hará más daño que beneficio.

                                                                              

Por ejemplo, algunas personas empiezan a trotar por las mañanas no porque quieran mejorar su salud, sino, digamos, porque sus amigos lo hacen, o porque esa actividad se puso de moda. O simplemente "por diversión", ¿por qué no?

 

No. Si inconsiderablemente y sin pensar en sus límites habituales trata de cambiar "algo" en su vida, y no lo que realmente necesita, usted se expone a un estrés provocado que afecta negativamente su salud, y al mismo tiempo desperdicia energía que podría utilizarse para cosas mucho más importantes y focalizadas.

 

En general la regla es muy sencilla. Sólo necesita cambiar algo si su vida le parece a un charco aburrido en el cual está cansado de estar sumergido.

 

A cambio, si tiene un estanque limpio, hermoso y fresco (aunque sea pequeño) y se siente muy bien dentro de él, quédese en él, realmente no hay nada de malo en esa zona de confort. Y si se aburre, puede salir de él en cualquier momento cuando considere necesario.

 

© Nikolai Barkov, 2022